Estamos sumidos en una crisis que nos provoca dolor, pesimismo, incertidumbre… parece que la vida nos ha dado un giro que solo era comprensible en los mundos de ficción. ¿Qué os voy a decir a cada uno de vosotros que no estéis viviendo cada día que pasa en el confinamiento de vuestra casa, en la soledad de vuestro cuarto, en la desesperación de la enfermedad que ha irrumpido impertinente en nuestra vida, o en el interior de tu alma?
No te escribo esto para compadecerte, o para aumentar en ti el miedo o la desesperanza. Ni tampoco para buscar un culpable de lo que nos pasa. Nuestra vida es así, nuestra historia lo acredita. Creemos que somos omnipotentes, fuertes, con superpoderes... Y nos viene este baño de realidad.
Es precisamente en estos momentos cuando sale de nosotros lo mejor que somos cada uno. ¿No os comnueven los gestos solidarios de muchas personas anónimas, posiblemente personas que nos hemos cruzado en la calle, que no sabíamos que eran nuestros vecinos, con actos creativos, alegres,optimistas, esperanzadores? Saldremos mucho más fortalecidos cuando esto se termine, que será pronto; valoraremos más aquello que dábamos por descontado, disfrutaremos más de los sencillo, apreciaremos el valor de pertenecer a una familia que es nuestro soporte y nuestra vida.
Mira este mensaje recogido en este video, y párate un poco a pensar. Coméntalo con tu familia. Será la mejor lección de hoy si consigues sustanciar lo que el Dr Mario Alonso nos comenta. Muy interesante. Coméntalo en la parte inferior si así lo deseas. Mucho ánimo a todos.
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